Por: Agencia de Noticias InnContext

La crisis global frena la recuperación del empleo en América Latina y el Caribe

América Latina y el Caribe fue una de las regiones de mayor crecimiento en 2021 (6,9 por ciento) luego de ser la más afectada por el impacto de la pandemia en 2020 (-7,0 por ciento). A pesar de ello, el PIB por habitante de América Latina acumuló en el bienio 2020-21 una caída promedio de 2,6 por ciento. La información proviene del último informe de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).

12 de las 20 economías de América Latina terminaron 2021 con un PIB por habitante inferior al de 2019. En el Caribe, excluyendo a Guyana, el PIB por habitante acumuló una disminución de 9,8 por ciento.

Sobre este escenario se agregó en el mes de febrero de 2022 la agresión de Rusia a Ucrania, agravando los problemas que ya venía sufriendo la economía global. En la región, ello ha tenido impactos directos negativos, derivados del aumento de los precios internacionales de la energía y de los alimentos, e impactos indirectos relacionados con el deterioro general de la economía mundial.

De acuerdo a las estimaciones del mes de julio de 2022 del Fondo Monetario Internacional, el crecimiento de América Latina y el Caribe será en 2022 del 3 por ciento, representando una reducción significativa respecto del crecimiento de 2021. Asimismo, de acuerdo a las últimas proyecciones de la CEPAL correspondientes al mes de agosto de 2022, el crecimiento regional será de 2,7 por ciento.

La tasa de ocupación regional en el primer trimestre de 2022 fue 57,2 por ciento, la tasa de participación económica fue 62,1 y la tasa de desocupación fue 7,9 por ciento. En 10 de 14 países la tasa de ocupación en el primer trimestre de 2022 aún no había recuperado los valores registrados en igual período de 2019. En la mitad de ellos la brecha era de alrededor del 5 por ciento o superior. A su vez, en la mayoría de ellos se evidencia cierta ralentización, tanto de la evolución del nivel de actividad como del empleo.

La tasa de informalidad regional en el cuarto trimestre de 2021 fue de casi 50 por ciento, cercano al registro de 2019. O sea, casi uno de cada dos trabajadores en la región es informal. A nivel regional la recuperación del empleo femenino ha exhibido una intensidad mayor a la experimentada por el empleo masculino. Sin embargo, las mujeres de menor nivel educativo no sólo han sido el grupo más golpeado por la pandemia sino también el más rezagado en la fase de recuperación del empleo. La tasa de ocupación regional de los jóvenes en el primer trimestre de 2022 fue 41 por ciento, casi 21 puntos porcentuales inferior a la de los adultos (61,7 por ciento).

Lee el informe completo acá: https://www.ilo.org/americas/