

Por: Redacción Central.
La reunión fue con miembros del Centro de Empresarios del Transporte de Pasajeros del Área Metropolitana (Cetrapam) y el viceministro de Transportes, además de representantes del Ministerio de Hacienda y la presidencia de la República.
Al final de la reunión, el viceministro de Transporte, Óscar Stark, indicó que la deuda pendiente de pago con respecto a subsidios es de G. 90.000 millones. Señaló que se aprobó, la semana pasada, el pago del complemento de lo correspondiente a enero. Recordó que el subsidio se paga primero como adelanto y la otra mitad cuando está terminando la tarifa técnica y se conozca la cantidad de pasajeros que subieron a las unidades de transporte.
Por otro lado, indicó que desconoce si habrá o no paro del transporte público, ya que es un tema que no tocaron en la reunión, al igual que la suba o no del pasaje. Refirió que la cartera ministerial buscará agilizar los datos de la tarifa correspondiente a febrero y marzo de este año, debido a que, con la de enero, tuvieron ciertas diferencias.
Indicó que las diferencias radicaron en que los transportistas propusieron que se les pague toda la deuda en junio, mientras que el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) les había ofrecido hacerlo en el transcurso de dos meses.
Señaló que los representantes de los transportistas, con quienes conversaron, llevan sus perspectivas al interior de sus gremios para socializar lo tratado en la reunión.
El viceministro indicó que buscarán los fondos dentro de otras instituciones para ver si cuentan con saldo para utilizarlo para el pago de subsidios. Cuando fue consultado si el pago se vuelve insostenible, insistió en que la situación se vuelve prácticamente difícil e insostenible, ya que cada año aumenta y es un adicional al presupuesto final.
Recordó que el sistema de transporte necesita una reestructuración, debido a que cuenta con muchas falencias y algunos buses cuentan con itinerarios de hace más de 50 años. Asimismo, refirió que abrieron 12 sumarios por la falta de colectivos y reconoce el déficit de oferta que ocurre cuando el sistema funciona normalmente igual.
“Ellos (los transportistas) dicen que, de alguna manera, uno de los problemas que tienen es que al atrasarse el subsidio, a ellos no les permite sacar los colectivos (a la calle). Pero, independientemente de eso, ellos tienen la obligación de cumplir con la cantidad de colectivos mínima. Por eso, hay un máximo y un mínimo de colectivo que deben estar en el sistema y por ese motivo, estamos avanzando en estos 12 sumarios”, señaló.
Para finalizar, recalcó que mínimamente faltan 220 unidades para regularizar, pero si realmente se cumpliera con la estructura real, se debe llegar a un máximo de 1.000 unidades, que es la cantidad que falta. Indicó que son 2.550 los colectivos autorizados, pero que solo circulan 1.665 y que debe haber por lo menos 1.885.