Por: Redacción Central.

Pese a la oposición de ministras, viceministras, docentes y estudiantes de gremios educativos, el Ministerio de Educación y Ciencias (MEC), finalmente autorizó el cateo de mochilas en todas las instituciones escolares del país, incluyendo a las públicas, privadas y privadas subvencionadas.

El ministro de Educación, Nicolás Zárate, prometió días atrás que escucharían todas las recomendaciones de la comunidad, pero decidió promulgar ayer la resolución Nº 845 por la cual “se autoriza al comité educativo institucional de gestión de riesgos (CEIGR) de cada institución educativa de gestión pública, privada y privada subvencionada a la revisión de mochilas o bolsos, en resguardo de la seguridad en el ámbito escolar”.

Autoridades y docentes criticaron además las contradicciones del documento.

Hasta la viceministra de Culto, Zulma Morales, aseguró  que los detectores y el cateo de mochilas no van a solucionar el problema. “Tal vez van a acrecentar”, declaró.

En uno de los puntos, se establece la obligatoriedad de “remitir un informe por escrito de lo sucedido y las acciones ejecutadas al respecto del caso”. Pero no especifica si este reporte debe hacerlo el CEIGR o la dirección de la institución educativa, tampoco aclara a qué instancia informar.

“Este punto no se puede cumplir. Ahí está la ironía, se va a responsabilizar a los padres, pero en qué momento van a poder controlar si deben trabajar para sobrevivir y llevar economía al hogar“, cuestionó Eladio Benítez, titular de la Unión Nacional de Educadores (Une - SN).

Agregó que tampoco cuentan con equipos técnicos en las instituciones para cumplir con todo lo que establece la norma. Exigieron que la aplicación se postergue hasta aclarar todos los puntos y debatir realmente con la comunidad.

Error. Hay una confusión de conceptos, el MEC está equivocado, aseguró el doctor Manuel Fresco, tras su participación en la mesa de seguridad. “El concepto de prevención que están utilizando está equivocado. Uno tiene que prevenir el delito y para prevenir el delito está bien el control de cateo, como se hace en la cárcel, porque la población de la cárcel es peligrosa, pero ese concepto no se puede aplicar a la escuela, el escenario educativo debe ser una escuela saludable”, agregó.

Invertir en salud mental, calidad educativa y mejorar la situación de los docentes deben ser las medidas a adoptar, a criterio del especialista.

Rechazo. Alumnas de la Unión Nacional de Centros de Estudiantes (Unepy) se retiraron de la mesa de seguridad, lamentando que el ministro las convocó únicamente para la foto, sin escuchar sus posturas sobre la normativa.

“Nos preocupa que se sobrepasen en los controles. Somos estudiantes, no delincuentes ni sospechosos. Se nos criminaliza mucho a todos”, apuntó Valeria Zayas, vocera de la organización. Explicó que tienen derecho a la presunción de inocencia y a la intimidad.

Desde el Ministerio de la Niñez y la Adolescencia y del Ministerio de la Defensa Pública también mantuvieron sus posturas contrarias al cateo y pidieron seguir buscando mejores alternativas de fondo.

Padres pueden negarse, dice el MEC

El director de Bienestar Estudiantil de la cartera, Hugo Tintel, ofreció ayer una conferencia donde defendió la normativa y la calificó de democrática. “Los padres, debidamente justificados, pueden alegar que no quieren los controles”, explicó. En la resolución se indica que en caso de negativa, los miembros del comité de riesgo deben resguardar la identidad de la familia que no se someterá a los cateos. “Se busca ampliar nuestro radio de acción respecto a lo que es seguridad en las instituciones educativas y reducir la vulnerabilidad ante la amenaza”, comentó el funcionario. Tintel aseguró también que se busca garantía del bienestar de directores, docentes y estudiantes. “El primer filtro se da en las casas, con los padres, después un segundo filtro será en las escuelas”. Manifestó que en el primer punto de la resolución 845 se insta al diálogo antes que la represión. Pero, en ninguno de los puntos de la norma se mencionan otras medidas que no sean el cateo de los bolsos o las mochilas. Se puede incautar desde objetos punzantes hasta vapeadores.