Por: Redacción Central

El presidente ejecutivo de Tesla, Elon Musk, empieza a despegarse del tumultuoso gobierno de Donald Trump. Tras haber desguazado gran parte de las dependencias estatales estadounidenses, anunció que se recluirá en su empresa automotriz, cuya productividad se redujo significativamente.

Este martes durante la llamada con analistas para presentar los resultados de la compañía, comunicó que pasará menos tiempo con el Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE, siglas en inglés) a partir de mayo.

Musk explicó que reducirá «significativamente» su participación en la gestión del departamento, y agregó que seguirá dedicando un «día o dos a la semana» a asuntos del Gobierno «para asegurarse de que el despilfarro y el fraude que hemos detenido no vuelvan con fuerza».

El informe financiero de Tesla publicado este martes mostró que los ingresos para el primer trimestre del año 2025 cayeron un 9% interanual, con los ingresos por automóviles cayendo en un 20 %, informó la agencia de noticias Xinhua.

Musk declaró anteriormente que centrarse en el departamento gubernamental le había dejado sin tiempo para gestionar Tesla, lo que plantea preocupaciones sobre si puede o no dirigir la empresa con eficacia.