Por: Víctor Báez Mosqueira. Fuente: Me Sumo- Diálogo Ciudadano

“ME SUMO-Diálogo ciudadano“ expresa su solidaridad con la acción unitaria emprendida por las organizaciones del magisterio paraguayo que reivindica:

1-Mayor presupuesto para la educación pública

2-Carrera docente

3-Escalafón docente y aumento salarial

4-Rechazo a la pretensión de establecer condicionamientos para la jubilación.

5-No a la precarización de la educación.

Los retaceos del gobierno a reconocer los derechos de la gente que trabaja responden a una política de sostenimiento de privilegios a sectores de élite, lo cual redunda en un sistema tributario débil y regresivo. Para solventar dicha situación los últimos gobiernos han aumentado enormemente el endeudamiento externo y la deuda pública en general, la cual ha pasado de 2.700 millones de dólares en 2011 (8 por ciento del PIB) a 19.000 millones de dólares en el 2024 (40 por ciento del PIB).

El Presupuesto General de la Nación revela la intención política de un gobierno, a cuál sector quiere sacar y a cuál beneficiar. No se necesita mucha información para concluir que las élites seguirán siendo las beneficiarias en el caso paraguayo.

La población paraguaya no ha visto mejoramientos en su nivel de vida con este creciente endeudamiento. Todo lo contrario. El año 2024 el gobierno ha destinado 1.800 millones de dólares al pago de la deuda externa, lo cual supera el presupuesto para salud y educación de la población.

Por otro lado, hay clasificaciones internacionales sobre la transparencia del proceso de elaboración del Presupuesto General de la Nación. El paraguayo no es considerado muy transparente. Sin embargo, según la organización “Budget International Partnership” hay dos países latinoamericanos que están entre los diez que tienen los presupuestos más transparentes del mundo. Son Brasil y México. Evidentemente en ellos, además de criterios técnicos, se promueve la participación de la gente en la elaboración del presupuesto. Las organizaciones sindicales, campesinas, vecinales, de género, entre otras, deben tener un rol protagónico en el destino que se le asigne al dinero público. Ya no se puede seguir elaborando un Presupuesto General de la Nación a puertas cerradas, haciéndolo aprobar a tambor batiente por una aplanadora partidaria.

La lucha de los maestros, del personal de la salud y otros es, a la vez, la búsqueda necesaria de ese “Estado Social de Derecho” establecido en el Art. 1 de la Constitución Nacional, hasta ahora postergado por algunos privilegiados que ni pagan impuestos.

Asunción, 19 de agosto de 2025