Por: César Verduga Vélez

Con la anticipación de casi dos siglos que sólo la filosofía o la literatura pueden proyectar, el escritor ruso Nikólai Gogol en su obra Almas muertas predijo lo que hoy ocurre con Volodímir Zelenski, Andrei Yermak, Timur Mindich, Alexander Zuckerman, German Goluchenko, Igor Mirinick y Svetlana Grinchuk.

Son integrantes de la gigantesca trama de la corrupción ucraniana denominada mediáticamente Shlagbaum, que ha transformado lágrimas y sangre de decenas de miles de ucranianos en euros y dólares depositados en bancos de Occidente y el Medio Oriente. La Unión Europea ante  semejante fenómeno de corrupción guarda al respecto temeroso y cómplice silencio.

En la obra predictiva del gran escritor ruso, publicada en 1842, el personaje siniestro Pavel Chichikov recorría la Rusia rural de la época coleccionando nombres de siervos muertos no registrados aún por el censo para utilizarlos como avales de un gran préstamo bancario que lo volvería inmensamente rico.  En la obra de Gogol, Chichikov es descubierto y huye.

Ucrania era considerada antes de la operación militar especial rusa como el país más corrupto de Europa. La actual trama le agrega el drama y la tragedia de que sus autores literalmente “chupan la sangre” de decenas de miles de ucranianos y mercenarios extranjeros robándose decenas de millones de dólares y euros de la ayuda que los gobiernos europeos, estadounidenses y del occidente colectivo otorgan a la corrupta camarilla que lidera el ilegítimo auto prorrogado presidente Zelenski.  

Recursos extraídos de los impuestos que sus pueblos pagan viendo crecientemente precarizado el estado de bienestar construido en la “Guerra Fría” como sacrificio necesario para ayudar a una corrupta camarilla que debería infligir una imposible derrota estratégica a Rusia.

Esta camarilla corrupta vende el humo de supuestas victorias. Realizan actos de terrorismo contra la población civil rusa o ucraniana rusoparlante. Esos actos terroristas son las almas muertas del personaje de Gogol para seguir pidiendo dinero a sus benefactores occidentales

Este monstruoso escándalo que el Occidente Colectivo oculta en sus medios, en su mayoría parte del aquelarre rusofóbico, no escapa al pueblo ucraniano ni a los medios verdaderamente libres del creciente mundo multipolar.

Ahora, cuando las posibilidades de un arreglo negociado a la guerra que las tropas rusas ganan cada día en la zona rusoparlante, cuya liberación definitiva, su incorporación jurídica internacionalmente reconocida a su madre patria parece estar cercal, la pregunta es qué pasará con Zelenski y su camarilla.

Podrá el ilegítimo presidente firmar algún acuerdo internacional válido. Con Donald Trump se habría comprometido a convocar a elecciones en este año. Un compromiso que no cumplió con el pretexto de que el lidera un país en guerra.

Podrá signar un acuerdo de paz conjuntamente con quien presida la Rada Suprema, poder legislativo, que tiene mayor legitimidad que Zelenski

Andrey Yermak, conocido como la mano derecha de Zelenki, y Timur Mindich, llamado mediáticamente “la billetera de Zelenski”, hicieron lo que el personaje de Nikolai Gogol y se fueron del círculo íntimo del poder ucraniano.

En el torbellino que vive Kiev es impredecible qué ocurrirá con el capo de la camarilla corrupta. Vale la pena recordar que Gogol no escribió un segundo volumen de Almas muertas porque se volvió místico y abandonó la literatura para ofrendarse al culto religioso. r Zelenski fue pronosticado por el literato ruso. Sin embargo, su final requería un segundo volumen que Gogol no escribió.